Civismo

Ayer tuve un día movidito. Tenía varias cosas que hacer y me tocó coger varios autobuses. Ayer llovió. Cuando en Sevilla llueve, llueve de verdad. Nada de chispear. Llueve.

Para empezar he de decir que el sistema de transporte público de esta ciudad es mejor en algunos aspectos que el de otras. Aún así, deja mucho que desear.

Previendo un aumento de usuarios salí quince minutos antes de mi casa. El resultado: llegué una media hora tarde.

Es muy común encontrarse autobuses con el letrero de “Fuera de Servicio“, incluso en hora punta. Los motivos pueden ser dos: por un lado, que el vehículo esté en retirada, esto es, que vaya a las cocheras; por otro, que esté completamente lleno y no quepan más pasajeros. A las ocho de la mañana la opción más posible es la segunda.

Una falta muy común de educación y respeto al resto de usuarios es subirse al autobús y quedarse en la entrada. En ocasiones, la mitad trasera del vehículo permanece vacía. Señores, pasen al fondo, que todos usamos el transporte público por necesidad y queremos llegar cuanto antes a nuestro destino.

Normal

Hará cosa de un mes el grupo neerlandés Delain lanzó su último single 'We are the others'. Merece la pena fijarse en la letra de la canción, sobre todo a una parte que a mí personalmente me llamó la atención:

"Normal is not the norm,

it's just an uniform"

Traducido vendría a ser: lo normal no es la norma, es sólo un uniforme.

 Foto del blog de Charlotte Wessels, cantante de Delain

Muchas veces se nos insta a que todos seamos iguales, que vistamos de manera similar y que actuemos de forma idéntica. Seguir al rebaño todo el tiempo o solo en algunas ocasiones nos hace sentir que pertenecemos a la sociedad, que encajamos dentro de un grupo. Pero no todos podemos medirnos por los mismos parámetros: cada individuo tiene su propio criterio (o debería tenerlo). 

Está claro que son necesarias las normas, ya que el ser humano es egoísta por naturaleza y buscará siempre el beneficio propio a costa de los demás. Sin embargo, en la forma de vestir, en la música que escuchamos, en las películas que nos gustan es más enriquecedor la variedad. ¿O no decía el dicho que para gustos los colores?

Como alguien dijo una vez: "tu libertad termina donde empieza la de los demás". Por lo tanto, si hay algo no hace daño a nadie, mejor es dejarlo en paz. Cada uno es como es y hay que saber apreciar su esencia, sin caer en prejuicios o ideas preconcebidas. 

Yo siempre respetaré al resto siempre y cuando me respeten a mí.

Horniman's

Horniman's ha cambiado recientemente la imagen de sus productos. Sus cajas ahora tienen una apariencia moderna y a la vez retro, que nos recuerda a las antiguas boticas. Han realizado una actualización hacia una tea shop más cool.

Sobre un fondo blanco en mosaico se ha colocado un rosetón de diferente forma, dependiendo de la categoría de producto. Con unos llamativos colores y ampliando su gama, resulta apetecible probar algunas de sus treinta variedades de tés e infusiones.

Viejos dilemas

Cuando algo que me gusta se convierte en tendencia siempre me surge el mismo dilema: por un lado, me encanta encontrar el producto con mayor facilidad: pero por otro, si se pone de moda todo el mundo lo usa y por lo tanto parte del encanto original se pierde.

Un ejemplo claro de esto son los búhos. Hasta hace unos meses era prácticamente imposible encontrar algo con un estampado de estos animalitos, pero ahora los hay en todo tipo de objetos: ropa, bisutería, complementos, papelería...

Cajas de Ikea 

 Colgante de Blanco

Colgante-reloj de Misako

Camiseta de Bershka

¿Es posible que la saturación en el mercado haga que algo que antes nos encantaba ahora incluso lo detestemos?

Viviendo en las nubes

El privilegio de observar el cielo de otoño

Círculos viciosos

O la pescadilla que se muerde la cola. Ésta es la realidad para muchos jóvenes:

Imagen publicada por Me encantan los buenos anuncios

Objetividad vs. Subjetividad

La objetividad para un profesional de la comunicación es la responsabiliad de aproximarse a la realidad dejando de lado sus preferencias personales o los propios intereses. En cambio, la subjetividad hace referencia a lo que pertenece al sujeto estableciendo una oposición a lo externo, es decir, se refiere a una cierta manera de pensar, de sentir que es propio de uno mismo. 

Hay quien se cuestiona si existe la objetividad, ya que es complicado ofrecer una información sin caer en nuestro punto de vista. Pero sí es posible explicar el mundo tal y como es sin marcar sus impresiones personales. Lo que también es cierto es que a veces se distorsiona la realidad o se transforma cuando el ser humano la interpreta, ya que no siempre se tiene una visión global del asunto, sino sólo desde un ángulo.


Con este blog pretendía tener una visión objetiva sobre el mundo de la comunicación, algo más "profesional". Con el paso de los días me he dado cuenta de que es más sencillo simplemente dar mi opinión sobre determinados temas puesto que se acerca más a cómo soy como persona. En el trabajo intento tener una postura lo más objetiva posible para desempeñar mis tareas adecuadamente, pero fuera de él soy una persona más bien emocional o visceral. En un mundo en el que siempre se está a merced de otros y debes controlar tu conducta cuando hay una parcela de tu vida que sólo tú controlas (una de ellas es esta página) tienes la necesidad de hacer y decir lo que piensas. Habrá algunos que nos les parezca bien, a otros directamente les dará igual, pero para mí es la manera de sentirme cómoda con algo que estoy haciendo.

Instagram

Comienza un nuevo día, una nueva semana y un nuevo mes. En la red hay muchas noticias para este lunes pero hay un titular que me ha llamado la atención: "Instagram supera por primera vez a Twitter en visitas desde dispositivos móviles" (vía PuroMarketing.com).

Para aquellos que aún no conozcan Instagram se trata de una aplicación para compartir fotos, a las que se les puede aplicar filtros, marcos... Se ha convertido en una nueva red social muy potente y de fácil uso. Su éxito se debe sobre todo al poder cada vez más visual de los social media. Otro dato relevante es el hecho de que Facebook compró Instagram por 1.000 millones de dólares.


Para mí es un aplicación imprescindible y totalmente recomendable que le da a tus fotos un toque especial. Aquí tenéis algunas de mis primeras fotos: